DEFINICIÓN
El aumento de glúteos con tejido graso se ha convertido en una de las cirugías estéticas más demandadas por las pacientes. Permite mejorar tanto la forma como el tamaño de los glúteos mediante la utilización de infiltraciones con el propio tejido graso de la paciente. Dicho tejido graso se obtiene mediante la lipoescultura, por lo que el efecto es doble, pues por un lado la paciente obtiene una mejora de su silueta al extraer los depósitos grasos, y por otro contrastando con unos glúteos más formados, voluminosos y agradables.
PROCEDIMIENTO
La cirugía comienza con una lipoescultura, en la que se obtendrá todo o parte del tejido graso de la paciente, la cantidad obtenida dependerá del resultado que la paciente desee. Si la paciente desea unos glúteos muy grandes y tiene cantidad suficiente de tejido graso en el cuerpo, en ocasiones no se puede poner toda la cantidad en una única cirugía, por lo que necesitaría dos intervenciones, dejando pasar entre 4 a 6 meses entre ellas. Con la lipoescultura además, se puede definir la musculatura de la paciente si es candidata a dicha cirugía. Una vez terminada la liposucción, el tejido graso se procesa de forma cuidadosa y se reinyecta con mucho cuidado en la zona de los glúteos. La inyección es la parte más delicada del procedimiento, pues de la técnica cuidadosa y el arte del cirujano, dependen tanto el resultado como la ausencia de complicaciones.
Esta cirugía entraña algunos riesgos importantes, por lo que la inyección de grasa intramuscular está completamente contraindicada actualmente. De ahí la importancia de realizarla por un cirujano experimentado en el procedimiento, con un buen instrumental, bajo unas condiciones de esterilidad en quirófano y en un hospital que cuente con todos los protocolos de seguridad.
CANDIDATOS
No todos los pacientes son aptos para esta cirugía, deben tener un IMC menor de 30, siendo los pacientes que más sobrepeso tienen en los que el resultado puede ser más voluminoso dado que existe mayor cantidad de tejido graso. Así mismo en pacientes delgados con alguna reserva de tejido graso, también se puede realizar la cirugía, buscando en este caso mejorar la forma, más que dar volumen. Por otro lado, es imprescindible tener una piel poco flácida, así como tener unos hábitos de vida sanos, pues tras la cirugía es muy importante mantener un peso estable y ejercitarse, con el objetivo de optimizar los resultados de la intervención. Si el paciente tiene mucha flacidez en la piel, no se suele recomendar este tipo de cirugía salvo que el paciente entienda las limitaciones del procedimiento.
INSTALACIONES
Este tipo de intervención debe realizarse en un hospital que cumpla con todos los requisitos sanitarios. Además de contar con una unidad de cuidados intensivos.
La cirugía estética es una cirugía muy reglada y con pocas complicaciones, pero en caso de que éstas pudieran aparecer, es imprescindible contar con el soporte de un buen hospital. De ahí que las cirugías low-cost ahorren en esto y se realicen en clínicas pequeñas en las que estas condiciones de seguridad no están cubiertas.
El Dr. Ospina es plenamente consciente de ello y por eso realiza todas sus cirugías en los quirófanos de Hospitales San Roque, pues le aporta ese plus de seguridad que quiere para sus pacientes.
PROFESIONALES
La realización de este tipo de intervención debe realizarla un cirujano plástico con experiencia en cirugía del contorno corporal. El Dr. Ospina tiene una amplia formación en su tierra natal Colombia en este tipo de intervención, donde se realiza de forma muy habitual, lo que le permite obtener unos resultados que están por encima de la media.
Este tipo de intervención requiere un esfuerzo físico importante y mantener un alto nivel de concentración durante varias horas, motivo por el cual el Dr. Ospina se entrena físicamente para estar en forma y poder desarrollar dicha técnica, empleando además nuevas tecnologías, que disminuyen la fatiga y permiten mejorar aún más sus resultados.
Por otro lado, el aumento de glúteos con grasa es una cirugía que puede entrañar riesgos vitales para el paciente si no se realiza con cuidado y conociendo bien la anatomía, por lo que se debe tener mucho cuidado a la hora de su realización, teniendo una buena preparación en dicho procedimiento.
POSTOPERATORIO
Tras la intervención es habitual y completamente normal que el paciente sienta una sensación de agujetas por todas las zonas intervenidas, esto suele normalizarse pasados 3 días. Por otra parte, es habitual que se produzca la salida de líquido inflamatorio a través de los pequeños orificios utilizados para extraer la grasa, esto puede durar varios días y es completamente normal y deseable.
El paciente simplemente debe mantener las pequeñas heridas limpias y tomar la medicación pautada en el momento del alta hospitalaria.
No podrá sentarse ni dormir boca arriba durante las primeras semanas. Esto es de vital importancia para conseguir un buen resultado, dado que por la presión, el tejido graso podría movilizarse y no recibir un correcto aporte sanguíneo, por lo que parte de la grasa injertada podría perderse y no obtenerse el resultado buscado.
COMPLICACIONES
La lipoescultura no es una cirugía en la que existan grandes despegamientos o cicatrices, por lo que su recuperación es más rápida que otras cirugías estéticas. Sin embargo, a pesar de tener fama de ser una cirugía “menos agresiva”, puede entrañar riesgos que pueden ser graves si no se tiene la adecuada formación y experiencia. De cara a evitarlas, el cirujano debe estar altamente cualificado, operar en centros homologados y utilizar el material e instrumental adecuado y debidamente esterilizado.
Otro tipo de complicación, leve pero más habitual, suelen ser las asimetrías o irregularidades en la piel, producidas por la mala aplicación de la técnica, que se ha realizado de forma muy superficial, de forma muy traumática o de forma inadecuada. Esto genera que la piel quede flácida y con ondulaciones, que suelen ser muy difíciles de corregir. No revierte gravedad en la salud del paciente, pero sí afecta de forma muy negativa al resultado estético de la cirugía.
CUIDADOS
El paciente deberá realizar un régimen de masajes de drenaje linfático durante las primeras semanas, así como el uso de aparatología para ayudar al drenaje de los edemas, además de mejorar la retracción de la piel.
El paciente puede reincorporarse a su trabajo pasados 7-10 días, utilizando las prendas de compresión debajo de su ropa.